El Aeropuerto Internacional de Dubai (Emiratos Árabes Unidos) es uno de los más transitados a nivel global, cuya cifra de pasajeros superó los 75 millones el año pasado. El fenómeno dron ha hecho que el número de estos dispositivos se dispare, y muchos de sus usuarios no respetan el espacio aéreo restringido en sus vuelos, por lo que se han producido incidentes que han llevado a paralizar las operaciones de las aerolíneas comerciales.
Por este motivo, el aeropuerto se encuentra realizando pruebas con detectores de drones para evitar incidentes como los ocurridos el pasado 29 de octubre, en los que la presencia de drones en el espacio aéreo del aeropuerto obligó a suspender las operaciones de las aerolíneas durante más de una hora, con el desencadenante de tener que retrasar 40 vuelos.
Los sistemas de detección tienen como objetivo realizar un seguimiento y hallar la localización de los drones cercanos en tiempo real, así como la radiofrecuencia en la que están operando. Las sanciones que condenan estos actos pueden acarrear hasta tres años de prisión y multas superiores a los 27.000 dólares.
La invasión del espacio aéreo de un aeropuerto, y el de Dubai en concreto, cuenta con varios antecedentes en los últimos meses. Y cada uno de estos sucesos supone importantes pérdidas económicas para las aerolíneas y para la propia estación aeroportuaria. Uno de ellos tuvo lugar el pasado mes de junio, suponiendo el cierre temporal (durante más de una hora) del aeropuerto y el desvío de una decena de vuelos a otros aeropuertos cercanos.
Los sucesos, en los que drones y aviones tripulados se ven involucrados, han aumentado considerablemente en los últimos años. Solo en 2015 se registraron cerca de 600 incidentes entre ambos tipos de vehículos aéreos, por lo que las autoridades de multitud de países se han puesto manos a la obra para establecer medidas que garanticen la seguridad aérea.
Imagen: mikecogh
