Su nombre nos resulta desconocido a casi todos. Se llama Violeta Bulc y es la Comisaria de Movilidad y Transporte de la Unión Europea. La semana pasada, durante la Conferencia sobre RPAS en Riga (“The Future of Flying”) la Comisaria subrayó que “Europa debe desarrollar reglas de seguridad orientadas a minimizar los riesgos asociados a la operación de drones”, enfatizando que “las normas deben ser proporcionales a los riesgos asociados”.
La conferencia, que contó con una amplísima participación del sector -desde representantes del Parlamento Europeo y la Comisión Europea, a delegados de las autoridades nacionales de aviación civil, representantes de las agencias nacionales de RPAS, fabricantes y empresas de servicios- sirvió para confirmar el compromiso de todo el sector para que se establezca un marco regulatorio común que haga compatible la imparable emergencia de los drones, con la seguridad y la protección de los derechos de los ciudadanos.
Este grado de acuerdo ha quedado plasmado en la Declaración de Riga, texto que establece los cinco principios rectores para el desarrollo de dicho marco:
- Los drones deben ser considerados como un nuevo tipo de aeronave (y deben estar sujetos a reglas adecuadas a los riesgos inherentes a cada operación).
- Las reglas europeas para la operación de drones deben desarrollarse con carácter inmediato.
- Deben desarrollarse tecnologías y estándares que faciliten la integración de los drones en el espacio aéreo europeo.
- La aceptación pública de los drones es clave para el crecimiento de los servicios asociados a los drones.
- El operador del dron es el responsable de su utilización.
Además de reconocer la necesidad de un marco regulatorio que haga posible la operación de drones en el espacio aéreo europeo, es fundamental el reconocimiento explícito que se hace a la necesidad ofrecer unas condiciones de mercado adecuadas que fomenten la inversión y, en definitiva, el crecimiento del sector. Asimismo se prevé la creación de un observatorio europeo que permita realizar un seguimiento del sector para, de esta manera, adoptar a futuro las decisiones que sean más adecuadas para el sector.
A partir de este momento la Agencia Europea de Seguridad Aérea (EASA) va a iniciar un proceso de consultas con los principales agentes del sector con el objetivo de formular una serie de recomendaciones que sirvan de base para la propuesta de revisión de la normativa de seguridad aérea que la Comisión Europea va a plantear antes de la finalización de 2015.
Como proponía la Comisaria Bulc a la finalización de su discurso en la capital de Letonia: “propongo que trabajemos conjuntamente a lo largo de los próximos meses y años con el objetivo de permitir las operaciones de drones en toda Europa a partir de 2016”. Esperamos que así sea.