Jindong, la compañía china de ventas por internet o “e-commerce”, ya realiza repartos de productos con drones en zonas rurales. De este modo, la firma oriental le toma la delantera a la empresa estadounidense Amazon, la cual pretendía introducir un sistema parecido en sus tareas de reparto, pero su puesta en marcha no llegará hasta el 2017 o el 2018.
Dos drones de Jindong ya realizan repartos en la ciudad de Suqian, en la provincia de Jiangsu, en la parte oriental de China. Prestan sus servicios en áreas con un número reducido de peticiones, pero sobre todo, en áreas de poca población, teniendo en cuenta las férreas normativas en materia de drones. Cada uno de los dispositivos puede atender 200 peticiones diarias y cada reparto tiene un coste de menos de 0,70 euros.
Estos drones pueden llevar hasta 15 kilos de carga y pueden desplazarse a una velocidad de 54 kilómetros por hora. La empresa asiática tiene la esperanza de que puedan incrementar la carga máxima que puedan transportar hasta los 30 kilos.
Jingdong ha obtenido los derechos del reparto de mercancías en esta ubicación durante un año, pero la firma china quiere expandir su radio de acción a otras zonas del sur y del suroeste del país. Según un alto directivo de la empresa, Xiao Jun, el dron solo necesita una hora para realizar el transporte de la mercancía. El dron recoge el producto desde su almacén de distribución y lo lleva hasta los ciudadanos de estas zonas, que aunque poco pobladas, reciben un servicio de igual o mejor calidad que el de los habitantes de las grandes ciudades.
Jingdong y Amazon no son las únicas empresas que se han volcado en el desarrollo de un sistema de reparto con drones. UPS realizó una inversión de 800.000 dólares en el proyecto de reparto de medicinas de Zipline. Por su parte, DHL ha realizado pruebas con su Parcelcopter, un multirrotor capaz de volar a más de 1.200 metros de altitud.
Imagen: tagawa