En medio de una gran expectación y con grandes promesas, así ha llegado el DJI Mavic Air. El nuevo dron de la compañía china tiene un precio competitivo, de menos de mil euros, y unas características propias de un dispositivo que está algo por encima del mercado de consumo. Los rumores habían anticipado algunas de las cualidades de este dron, como su capacidad para grabar vídeo en 4K y el hecho de que sea plegable. A continuación damos un repaso a todo lo que ha presentado la firma asiático.
Tras un repaso a los últimos lanzamientos de DJI, desde el Spark al Phantom 4 Pro y con una mención al primer Mavic, el responsable de la compañía en Estados Unidos se ha metido en harina. La presentación ha intentado ser emblemática. El carácter compacto y plegable se ha puesto de manifiesto inmediatamente. El encargado de introducir el dron se metió la mano en el bolsillo y sacó el controlador, más pequeño que anteriores versiones, y después volvió a meterse la mano en un bolsillo y extrajo un Mavic Air.
Es un dron de pequeño tamaño, solo pesa 430 gramos y tiene las hélices plegables para facilitar su portabilidad. Es tan compacto que DJI ha tenido que diseñar un nuevo sistema de ventilación para que el sistema no se sature, debido a su carácter compacto. Sus dimensiones y peso también hacen que pueda llegar a los 68,4 km/h de velocidad punta. Esta pequeñez oculta una serie de detalles de tecnología punta que la firma china ha incluido en el Mavic Air, que ya se puede comprar por un precio de 849 euros.
Otros datos técnicos interesantes es que el alcance del controlador llega hasta los 4 kilómetros. Su autonomía de vuelo es de 21 minutos. El dron puede aguantar hasta los 4,8 kilómetros de altura sobre el nivel del mar. La compañía ha señalado su capacidad para resistir al viento y la estabilidad de su cámara. Y es que si hay algo para lo que está hecho este nuevo dron es para sacar fotos y grabar vídeos.
El sensor de la cámara puede llegar hasta los 32 megapíxeles en modo panorama. Esto no quiere decir que la cámara dispare en estas condiciones siempre, pero se puede usar para ciertas tomas. El gimbal tiene tres ejes, una mejora con respecto a otros drones, como el Spark, que contaban con dos. La idea es estabilizar al máximo el sensor fotográfico. DJI señala que se trata de un componente fundamental para aumentar la precisión de las imágenes, por ejemplo, reduciendo la vibración. Aunque también sirve para proteger la cámara, tanto en el aire como en el transporte del dispositivo.
En cuanto a otras características de la cámara, el sensor es CMOS 1/2.3 y el software que la maneja incluye HDR, para optimizar la exposición de la luz en cada punto de la imagen. La grabación de vídeo se hace en 4K, pero es que además el dron puede filmar a 120 fps. El Mavic Air además cuenta con 8 GB de almacenamiento interno, por si el usuario olvida su tarjeta microSD.
La cámara del Mavic Air seguir objetos o personas con su función ActiveTrack. Además, el control remoto tiene algunos botones para realizar acciones rápidas con estas fotos o vídeos. La presentación se ha extendido en algunas funciones orientadas a dar rienda suelta a la creatividad de los usuarios, como el disparo tipo boomerang, en el que el dron se acerca y se aleja automáticamente. Son funcionalidades que se corresponden con el público al que está dirigido y también con su precio de venta.
El dispositivo también se puede controlar mediante gestos de las manos. El usuario solo tiene que indicar mediante gestos, con la palma de la mano dirigida hacia el Mavic Air lo que quiere hacer. Evidentemente el dron también se puede controlar mediante el smartphone.
Sin embargo, la mejor forma de manejarlo es el controlador, otra de las novedades. Se trata de un aparato compacto, que se puede guardar fácilmente en un bolsillo. Por cierto que otra de las características del nuevo dron cuenta con el modo de vuelo autónomo 2.0, apoyado por 7 cámaras que componen el sistema de visión artificial y sensores que apuntan en tres direcciones. La compañía también ha introducido su APAS, un modo de vuelo asistido que permite evitar obstáculos dinámicamente. En lugar de detenerse sortea los objetos que podrían chocar con él.
El lugar del Mavic Air: por precio y por capacidades
DJI lo quiere todo y lo ha demostrado en los dos últimos años. Si anteriormente su gama más conocida con mucho eran los Phantom, ahora las cosas han cambiado. Evidentemente la popularidad de esta familia de drones está fuera de toda duda, pero desde septiembre de 2016, la compañía ha introducido dos nuevas líneas de productos: Mavic y Spark.
El más barato de todos, el Spark, se sitúa en el mercado de consumo. No es un juguete, pero tiene un precio asequible para el gran público y características reseñables como para hacer fotos decentes y algunos vídeos. El Mavic Air se posiciona claramente por encima de este dispositivo, pero por debajo de la versión Pro de su misma familia.
Los 849 euros del nuevo dron no están dirigidos a todo el mundo. Pero sí a una gran cantidad de personas con una fuerte afición por los drones, pero que no quiere gastarse más de mil euros. El Mavic Air tiene unas capacidades fotográficas sobresalientes para un producto de consumo. Incluso podría bastar para ciertos trabajos audiovisuales. Si bien en otros apartados técnicos flaquearía si se quisiera destinar a tareas profesionales. Pero como entretenimiento se encuadra sin duda en la alta gama sin incurrir en un precio alto.
El hecho de que sus cuatro hélices se puedan plegar y el dispositivo se guarde fácilmente en un bolsillo también resulta destacable. Y es que, como indica una de las fotos (situada un párrafo más arriba) con las que DJI promociona el nuevo lanzamiento, el dron está destinado a la captación de momentos especiales. En la imagen que aparece un poco más arriba se puede ver a dos personas, lo que podría ser una pareja, cargados con mochilas y haciendo senderismo en un marco exuberante de costa montañosa. Esta podría ser la idea que tiene la compañía china de su nuevo producto: un recurso de alta gama para grabar vacaciones.