Un estudio sobre el mercado de los drones a nivel mundial, realizado por la consultora informática Wintergreen Research, estima que para el año 2022 el valor del mercado de estas aeronaves no tripuladas alcanzará los 36.900 millones de dólares.
Los dispositivos no tripulados han alcanzado un alto nivel de madurez en el mercado. En el caso de DJI, el pasado año obtuvo unos ingresos de 1.000 millones de dólares, el doble que en el ejercicio anterior. A nivel global, las cifras que actualmente se mueven en el mercado ascienden a 6.800 millones de dólares. En los próximos seis años, esta cantidad se multiplicaría por seis, ascendiendo a los 36.900 millones de dólares. Así, el futuro de los drones parece bastante alentador si atendemos a los cálculos de Wintergreen Research.
En el estudio se han analizado los drones dividiéndolos en nueve categorías diferentes, teniendo en cuenta su ámbito de aplicación: agricultura, petróleo y gas, vigilancia de fronteras, aplicación de las leyes, seguridad privada, respuesta ante desastres, entrega de paquetería, fotografía y vídeo.
El mundo de los drones ha crecido con fuerza en los últimos años gracias a los grandes avances de las nuevas tecnologías. Uno de los puntos clave para que el sector comercial de los drones se haya disparado es la incorporación de cámaras a las aeronaves no tripuladas. Esta ventaja ha hecho que para múltiples usos, estos dispositivos puedan sustituir a los medios convencionales, como ocurre en el caso del mapeo 3D, la observación de oleoductos, la fotografía aérea, la entrega de mercancías, así como diferentes usos en agricultura y la vigilancia, tanto pública como privada.
Este informe puede ir en concordancia con la estimación que IDC puso sobre la mesa para el período 2016-2019. Ya que se prevé que las ventas de drones con cámara, vendidos en China, crezcan un 769% en los próximos tres años, alcanzando la cifra de 3.000 millones de unidades solo en el país asiático.
Imagen: Jun.Ohashi
