El proyecto de crear una red de puertos de drones en Ruanda está cada vez más cerca. El arquitecto Norman Foster ha presentado el proyecto, el cual está inspirado en las bóvedas tabicadas comunes en la zona mediterránea de nuestro país.
Como ya informamos en ToDrone, estaba previsto que se empezase a dar forma al proyecto a lo largo de 2016. Por el momento, ya se ha realizado una recreación a escala real de una de las bóvedas que compondrían las infraestructuras. Este modelo lo ha llevado a cabo el profesional de la construcción Carlos Martín Jiménez junto con técnicos del MIT (Instituto Tecnológico de Massachussetts).
Las condiciones geográficas y la falta de infraestructuras que existen en África, y en concreto en Ruanda, han llevado a la organización que lleva a cabo el proyecto a decantarse por esta localización. Con esta iniciativa se construirán esta especie de hangares mediante la unión de varias bóvedas. Estas estructuras servirán para almacenar suministros médicos, y de otros tipos, que serán repartidos por el país mediante el uso de drones.
La previsión es que, para el año 2020, haya tres centros construidos para que el proyecto empiece a funcionar. Según el organismo que impulsa la iniciativa, la Fundación Norman Foster, se pretende que para 2030 cada ciudad africana, así como las de otras economías emergentes, cuente con su propio puerto de drones.
En cuanto a la fabricación de las infraestructuras, la idea se ha planteado para que cada puerto pueda ser construido con materiales disponibles en el propio país donde se edificará. Es decir, el único material que sería necesario importar para construir las infraestructuras sería la maquinaria empleada en el proceso.
Este proyecto podría ir ligado a otro que también se ubica en este país africano y que arrancará el próximo mes de julio. Se trata de un sistema de reparto de medicinas mediante drones que la empresa Zipline ha puesto en marcha en Ruanda. Gracias a este sistema, suministros como la sangre o los medicamentos pueden ser transportados a más de 120 kilómetros en un vuelo único y también pueden ser entregados en apenas 30 minutos a algunos puntos más cercanos.
Imágenes: Foster and Partners
