Sin duda es uno de los drones más singulares que han visitado las páginas de ToDrone. Desde luego es el más económico de todos. Un avión de papel convertido en un RPA controlado desde un smartphone gracias a un sencillo motor y a un básico sistema de control.
El dispositivo, comercializado por la firma PowerUpToys, combina la técnica tradicional del origami con la tecnología de última generación para resultar en un dron con un peso aproximado 20 gramos, una autonomía de 10 minutos y un radio de acción superior a los 50 metros.
Para adaptarse a todos los gustos y preferencias el fabricante ofrece además sencillas plantillas (y tutoriales) adaptadas a distintas configuraciones y tamaños de papel. Muchas de las configuraciones propuestas se corresponden con los tradicionales aviones de papel a los que estamos acostumbrados.
Sin restar méritos comerciales a las propuestas de PowerUpToys, el hecho verdaderamente significativo es que la autoridad aérea de Estados Unidos (FAA) acaba de conceder una autorización para utilizar este dispositivo en la realización comercial de fotografías y vídeos (siempre y cuando se cumplan las condiciones de contorno habituales para cualquier aeronave). Una decisión que puede dejar incrédulo a más de uno tratándose de un simple avión de papel.
Que la obtención de esta autorización lleve a la utilización comercial de este dispositivo es una cuestión que está por ver, pero sin duda este dispositivo viene a cuestionar los límites de qué se puede y qué no se puede considerar una aeronave y, sobre todo, plantea una cuestión: ¿es proporcionado regular el uso de un dispositivo de estas características como si de un RPA convencional se tratase?.
En tanto encontramos la respuesta os dejamos con un vídeo del PowerUp 3.0 Smartphone para que juzguéis vosotros mismos.