DARPA, la agencia de Defensa estadounidense, está desarrollando una nueva inciativa militar, el proyecto CODE (Collaborative Operations in Denied Environment). Un software que permite volar a los drones en bandadas y evitar posibles interferencias provocadas por intentos de jamming (interferencias en las comunicaciones de los drones que repelan y cambien su trayectoria).
Esta tecnología facilita la comunicación entre varios dispositivos que vuelan en formación, que pueden sincronizarse y realizar operaciones que una sola aeronave no podría realizar. Además, son drones que se han adaptado para que puedan detonarse contra un objetivo a modo de misil balístico.
Según un comunicado de la propia agencia de Defensa, este programa pretende demostrar el valor de la autonomía colaborativa, es decir, el valor de que los drones sean lo suficientemente inteligentes para sincronizarse con otras aeronaves y volar en grupo. Además, están diseñados para no perder la sincronización, incluso en zonas donde pueda fallar la conexión mediante georreferenciación.
El proyecto CODE también tiene como objetivo enseñar a los drones a reconocer y responder ante obstáculos e impedimentos de todo tipo. Gracias a la inteligencia con la que se los ha dotado, podrán analizar a sus objetivos y responder adecuadamente a las órdenes prestablecidas para la operación en cuestión. Pero para entender el funcionamiento de esta nueva iniciativa de DARPA, echad un vistazo a esta breve recreación digital del funcionamiento del proyecto CODE:
DARPA lleva varios años tratando de explotar la utilidad de las aeronaves no tripuladas. La implantación de una inteligencia cada vez más desarrollada en los drones es algo que la agencia de Defensa lleva impulsado desde hace tiempo. Y en esta labor se ha cruzado una empresa española, Erle Robotics, compañía a la que ha encargado y financiado un proyecto para crear una plataforma que permita elaborar piezas y componentes para drones.
Imagen y vídeo: DARPA
